Centré tanto mi tesis doctoral en Ciencias de la Educación como mi posterior publicación en el análisis y diseño de contextos educativos vivenciales en la naturaleza y con la mediación de los caballos. La inmensa curiosidad por comprender la conducta humana y su diversidad en todo el mundo me llevó a licenciarme en Antropología Social y Cultural, pero mi formación y profesión base durante años, tanto en escuela concertada como pública fue como Maestra de ‘Educación Especial y orientadora en innovación metodológica. Mi etapa como docente universitaria en la facultad de Educación, Psicología y Trabajo Social de la UdL y como orientadora-formadora de profesionales del sector, junto con la experiencia acompañando a familias y sus niños en el proceso educativo, m ‘ otorga una visión bastante completa del ámbito y me permite repensar y revisar constantemente nuestro funcionamiento, para ofrecer la mejor versión que combine el respeto por los ritmos madurativos y la atención personalizada, con la construcción de los aprendizajes competenciales de una forma activa y significativa en interacción con el medio natural.

Desde su constitución -hace más de una década- coordino la Fundación de Terapias Ecuestres la Manreana, y desde 2019 también dedico mi energía e ilusión a dar forma al proyecto educativo que nos ocupa.

…una escuela que veía a la infancia con otros ojos, con una mirada respetuosa y acogedora, que daba un papel activo a los niños y niñas para que el aprendizaje se diera partiendo de sus intereses y motivaciones. Allí vi que otra forma de educar y acompañar a niños era posible. Y esa chispa hizo crecer un fuego en mí que he ido cuidando día a día para mantenerlo vivo.

Poco a poco, mi camino formativo y profesional se ha ido dibujando y tomando un rumbo personal a través de cursos sobre acompañamiento emocional y educación viva y holística, combinado con muchas lecturas, voluntariados en proyectos singulares y en el mundo del ocio, y la práctica diaria en espacios educativos libres.

A menudo pienso que estoy en la Escoleta porque aquí encuentro la coherencia entre lo que soy y lo que hago, y puedo acompañar a personitas con amor, presencia y respeto, en un entorno lleno de vida y alegría.

Si miro atrás, desde que soy pequeña los animales y la naturaleza siempre han sido parte de mi persona y de mi desarrollo, y ya de mayor, mi camino ha ido en paralelo a ellos. Mientras estudiaba la carrera de psicología trabajaba con niños y caballos dando clases de equitación, una vez me especialicé en intervenciones asistidas con caballos seguí adquiriendo experiencia en entornos naturales, con animales y niños, en Cataluña e Inglaterra, no sólo en espacios ecuestres sino también en escuelas de pedagogía Waldorf. Para mí es una necesidad básica estar en conexión con la naturaleza y, en una sociedad donde las pantallas están tan presentes, intento ofrecer allá donde voy a que las personas, especialmente los niños, puedan reconectar con la naturaleza.

…así como monitora y directora de lleure.

Empecé a trabajar en diversas escuelas privadas y públicas durante más de 8 años, proceso que desarrollaba a la par que los estudios de Educación Holística, de la mano de Ignasi Salvatella y el Instituto de Educación Holística de Barcelona, con quien estuve colaborando durante más de diez años en la organización de cursos sobre comunicación no violenta, yoga para niños, pedagogía 3000 con Noemi Paymal, meditación en el aula y en la vida, Método Asiri con Ivette Carrión, entre otros- así como impartiendo cursos de introducción a la Educación Holística. Este camino me abrió las puertas y la mirada hacia un enfoque totalmente diferente de acompañamiento infantil.

Otro aspecto de mi vida al que me siento muy vinculada es el baile y la expresión corporal o danza creativa, en el que sigo formándome. A diario hago visible su presencia como acompañante en la Escoleta del Mas donde el sueño de todos estos años se ha hecho realidad; un lugar donde acompañar desde la vida y para la vida, con amor y respeto a cada pequeño ser único y especial, en un marco de naturaleza, animales y constante desarrollo y crecimiento.

…Durante casi ocho años me desempeñé como orientador en el Equipo de Orientación Pedagógico del Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires en escuelas infantiles y primarias y como docente universitario, experiencias transversales de mi vida personal y profesional que me ayudaron a descubrir la educación viva y las pedagogías activas. Llegué a ellas buscando una cosmovisión de la educación, la crianza y del niñx que incluya el respeto, la vivencia, el juego, la experiencia, el afecto y la expresión como dimensiones centrales. Es así como comencé a transitar, desde 2016, mi camino como acompañante y orientador en proyectos de educación activa y respetuosa, tanto en Buenos Aires como en España y que continúo caminando hasta hoy.

En la actualidad soy acompañante del grupo CAU en la Escoleta del Mas y terapeuta en intervención psicoeducativa asistida con caballos (IPSIAC) en Fundación Manreana.

…Me gradué como profesor de Educación Física y luego me especialicé en pedagogía viva/libre en Argentina y en pedagogía en la naturaleza en CIFREP (Chile) – Asilo nel Bosco (Italia). Co-creé el primer espacio de educación viva en la naturaleza en mi ciudad natal (Mar del plata) pero se vio truncado el proyecto con la llegada del confinamiento. Tras esa experiencia decidí venir a conocer nuevos proyectos educativos en España y específicamente en Cataluña, donde realicé observaciones en varios proyectos de Barcelona (Badallot, Xantala, entre otros), trabajé como acompañante en Manada Gori Gori y en El Niu. También hice un voluntariado como acompañante en la Escoleta del Mas y la Fundació La Manreana, lugar donde actualmente me desenvuelvo como coordinador de actividades educativas en la granja escuela.

… Actualmente me siento con ganas de seguir creciendo tanto personal como profesionalmente a través de las pedagogías activas que tienen presente la mirada de los niños desde el respeto y el amor, dejando a un lado etiquetas limitantes y acompañando sus necesidades, teniendo en cuenta su ritmo madurativo…sin prisas pero con calidad. En la Escoleta del Mas he encontrado un espacio privilegiado donde ejercer, tanto por el entorno que nos rodea como por el tipo de acompañamiento respetuoso que ofrecemos. Disfruto, especialmente, pudiendo ofrecer un espacio educativo donde los niños son escuchados y construyen a través de experiencias reales, apoyadas en vínculos afectivos firmes y desde la confianza y la mirada cercana